Luis Arribas: “En misión compartida no dejaremos de buscar caminos de encuentro”

El pasado sábado 14 de enero tuvo lugar en el Centro Hogar María Inmaculada de Madrid un encuentro propuesto por el área de misión compartida de la conferencia española de religiosos (CONFER) que congregó a diversos institutos para compartir la experiencia vivida en dos temas propuestos, la vinculación carismática de los seglares y la dimensión comunitaria entre religiosos y seglares.

Hablar hoy de misión compartida va más allá de un proceso de simple sustitución de religiosos por laicos, o siquiera la de una mera colaboración. “La misión compartida ya se entiende como una verdadera vinculación y corresponsabilidad que se encarna y compromete en y con nuestro proyecto de vida”, explica Luis Arribas, prefecto de apostolado de nuestra provincia y asistente al encuentro junto al misionero Miguel Ángel Velasco.

Además, tanto la jornada de la mañana como la de la tarde abrieron el foco más allá de las distinciones específicas de cada peculiar forma cristiana, pues quiso subrayar la palabra vida antes que el adjetivo que le acompaña, ya sea el de consagrado o el de religioso. En nuestro caso, este hecho se evidenció con la presencia el sábado de diversos representantes de todas las ramas claretianas. De tal modo, entre los asistentes pudo verse a Ángel Roldán, del movimiento Seglares Claretianos; Margarita García, RMI; María Gracia García Baquero, directora general de la Institución Claretiana; y la consagrada secular María del Mar Álvarez, de Filiación Cordimariana.

Desde la pastoral

¿Cómo nos vinculamos? ¿Cómo poder llegar a dar a conocer nuestro carisma? ¿Qué calidad tienen las mutuas relaciones entre religiosos y seglares? Son preguntas que han estado presentes durante el día.

Para el P. Arribas, “en el caso de la familia claretiana, aunque no tenemos experiencia de vida comunitaria compartida bajo el mismo techo, vivimos una relación carismática que lleva a diseñar y realizar trabajos apostólicos y compartir actividades comunes. Es una vivencia compartida de la misión, con sentido de pertenencia a la familia carismática. En esta línea de cercanía, encuentro y misión compartida, entre las diferentes ramas, se está trabajando a nivel generalicio y a niveles inferiores. Se están retomando reflexiones y acciones para favorecer la misión compartida y la vivencia carismática común entre todas las ramas de la familia claretiana”.

“Estamos profundizando en temas fundamentales como el carisma, la misión y el sentido comunitario del carisma claretiano, proponiendo encuentros formativos para profesores, educadores y agentes de pastoral, para incorporarlos a la vivencia carismática de nuestra vida y misión. Además, cabe destacar cómo los Seglares Claretianos, en su proceso de vinculación al movimiento, se centran en dar a conocer el carisma claretiano y acompañar en la vivencia del mismo”, completa.

Por otra parte, el prefecto recalca que “estamos también haciendo un esfuerzo entre las distintas ramas de la Familia Claretiana con proyectos concretos como el de ‘Claret Way’”. También “con el trabajo en común junto a los Seglares Claretianos en diferentes lugares”.

Bien es cierto que “no todos debemos de abarcar todo, ni todos debemos estar para lo mismo”, pero “no dejaremos de buscar caminos de encuentro desde la espiritualidad, la celebración y el trabajo común”, concluye.