Nuestra Misión de Zúrich es un ecosistema muy rico, con un alto valor humano porque atiende a un colectivo especial: las personas migrantes. Existen migrantes de todo tipo, pero muchos de los que acuden a la misión son personas vulnerables que están en situación irregular. Ellos y ellas tienen un lugar privilegiado en la Misión porque también son ciudadanos esenciales en el Reino de Dios que no necesita “papeles” ni fronteras
“Su martirio no es el final del camino, uno nuevo comienza con Cristo resucitado. Caminemos, pues, esperanzados. Y que este tiempo que Jesús nos recuerda sirva para seguir inspirándonos y viendo en el amor al prójimo, la salvación nuestra” (Francisco J. Carril, director de Fundación Proclade)
Esta Cuaresma nuestros pastoralistas nos ofrecen los materiales «dispuestos para escuchar», -en consonancia con aquel «atentos para escuchar» del Adviento-. Una forma de transitar acompañados por este Jesús dispuesto a vivir su Pascua, y en Él, todos nosotros