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P. VICENTE DOMINGO CEBRIÁN, CMF

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Fecha de nacimiento: 
Domingo, 26 Mayo, 1946
Fecha de defunción: 
Martes, 11 Septiembre, 2012
Biografía: 

* Nació en El Poyo del Cid (Teruel) el 26 de mayo de 1946.

* Primera profesión en El Pueyo el 15 de agosto de 1966.

* Ordenado Sacerdote en Zaragoza el 14 de abril de 1974.

* Falleció en Zaragoza el 11 de septiembre de 2012.

Al amanecer del 11de septiembre de 2012, de un modo que no podía esperarse días antes, el Señor llamó a su presencia a nuestro hermano Vicente, de la Comunidad de Zaragoza-Parroquia, que vivió 66 años, 47 de ellos en la Congregación, 38 de ministerio sacerdotal.

En 1958, a los doce años, Vicente llega al postulantado de Alagón, donde cursa tres años con el P. Alfredo Mª Pérez como formador. En 1965 comienza el noviciado en El Pueyo. Tiene como maestro al P. José Mª Ciller. El P. Eleuterio Briongos le toma allí la primera profesión.

Los siguientes años de su vida reflejan la singladura posconciliar de muchos claretianos españoles de su edad. Comienza sus estudios de Filosofía en Játiva (del 66 al 68), pasa luego a Loja (Granada), donde los culmina los años 68-70. En Salamanca inicia los estudios teológicos (70-72), que acabará en el Centro Regional de Estudios Teológicos de Aragón en Zaragoza (72-74). Entre sus formadores y superiores de esos años están C. Astiz, J. Mª Palacios, A. Bocos y F. Sebastián. Ante éste hace el 2 de abril de 1972 la profesión perpetua. En 1974 es ordenado Diácono y Presbítero; preside ambas celebraciones D. Damián Iguacén, entonces Obispo de Barbastro.

Recién ordenado ejerce unos meses como Vicario de la Parroquia del Corazón de María de Zaragoza, servicio que volvió a desempeñar los últimos cuatro años de su vida. En 1975 es enviado a Cartagena, comunidad a la que pertenecerá once años: es Vicario Parroquial (hasta el 83) y Párroco y Superior del 83 al 86. Desde allí se desplaza a Madrid, donde se licencia en Teología con especialidad en Catequética, títulos que une al que antes había obtenido de Maestro Nacional.

El V Capítulo Provincial de Aragón de 1986 le hace Consultor Provincial y Prefecto de Apostolado. Durante ese sexenio es también el Vicario Provincial: vive en Valencia-Ermita del 86 al 89 y en Madrid del 89 al 92. El VI Capítulo le reelige como Consultor y Prefecto de Apostolado; pasa a vivir en Zaragoza (92-95). En octubre del 95 vuelve a Valencia-Ermita, allí vivirá dos años y pico. Vicario Provincial de nuevo desde septiembre de 1997, en octubre de ese año sufre un serio accidente de automóvil del que, pese a fracturas de vértebra y esternón, se recupera. El 4 de enero de 1998 el VII Capítulo de Aragón le elige Superior Provincial, servicio que desarrolla durante un sexenio y para el que es reelegido en enero de 2004. Tres años después pasa a formar parte -como Vicario Provincial y Prefecto de Espiritualidad- del primer gobierno provincial de Santiago. A partir de agosto de 2007, fuera ya del gobierno de la Provincia, queda estrechamente ligado a este como miembro de la Junta Permanente, servicio que ha desempeñado con responsabilidad y constancia. Tras un año como superior-delegado de la comunidad de Madrid- Á. Mendizábal 65, desde 2008 formó parte de la comunidad de Zaragoza-Parroquia.

En medio de su entrega generosa a las tareas de animación y gobierno que los hermanos le encomendamos durante dos décadas, Vicente buscó huecos para animar misiones populares, retiros y ejercicios, acompañar matrimonios… En su corazón hubo siempre un lugar privilegiado para la presencia de la Familia Claretiana en Paraguay, con la que gozó singularmente. Dotado de una sensibilidad especial por la comunión participó intensamente en las tareas de Confer y cuidó la relación con los pastores de las diversas iglesias locales. Falleció siendo Presidente de la Conferencia de Religiosos de Zaragoza y miembro del Consejo Presbiteral de la Diócesis.

El día de su muerte, desde el dolor, los Claretianos nos unimos a muchas personas de bien para pedir al Señor por medio del Corazón de María y de los Mártires Claretianos (a los que tanto amó) que concediera a Vicente la paz y fortaleciera nuestra esperanza. En 1997, a raíz del serio accidente sufrido, Vicente pedía la gracia de “aprovechar esta segunda oportunidad que Dios me da para amarle con pasión y seguirle con más radicalidad”. Confiamos en que esa pasión se haya hecho encuentro definitivo.

La Parroquia del Corazón de María de Zaragoza, a la que sirvió con tanto afecto, veló sus restos mortales. El día 12 de septiembre cerca de setenta sacerdotes, casi tantos del clero secular como Claretianos y otros religiosos, se unieron a numerosos fieles para encomendar su alma al Señor. La víspera D. Manuel Ureña, Arzobispo de Zaragoza, se acercó a orar ante sus restos. Presidió el Funeral de cuerpo presente, al que asistieron otros dos miembros de su gobierno desplazados desde Madrid, el P. Josep Maria Abella, Superior General de los Claretianos. Se encargó de la Homilía el P. Isidro Jiménez, que le precedió como Superior Provincial de Aragón. En varios lugares (Lambaré-Paraguay, Cartagena, Valencia) se celebraron funerales por su eterno descanso.

Querido Vicente: descansa en paz.

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