Se encuentra usted aquí

París: un doce de octubre especial

Versión para impresiónEnviar por emailVersión PDF

El 12 de octubre, fiesta nacional de España, día de la Virgen del Pilar, fecha que recuerda de modo especial los vínculos entre España y muchas naciones de América, Filipinas y Guinea Ecuatorial, es siempre un día importante en el calendario de la Misión Española de París.

El calendario ha permitido en 2020 que la efeméride, que muchos años cae entre semana y en día laborable, se haya visto rodeada de más solemnidad, dada la cercanía del domingo, en cuya tarde el templo y la comunidad se vistieron de gala para acompañar al joven misionero claretiano Denis Malov en su profesión religiosa perpetua.

Denis, nacido en Murmansk (Rusia) en 1990, cuando la situación política comenzaba a permitir de modo incipiente la manifestación pública de la fe, ya expresó su deseo de entregar del todo su vida a Dios al emitir su primera profesión religiosa en febrero de 2016. Ahora, cuatro años y pico después, tras varios previos de clarificación vocacional, ha podido convertir ese deseo en palabra pública y testimonio.

Arropado por una asamblea eucarística cuya joven media de edad sorprendería a cualquiera que frecuente las iglesias de Europa, Denis fue acompañado por sus tres hermanos de comunidad (llamados pronto a ser cuatro) y por la presencia de los PP. José Ramón Sanz y Teodoro Bahillo, consultores provinciales, que visibilizaba la comunión y afecto del resto de los misioneros de Santiago.

La tecnología facilitó que la celebración fuera seguida con especial emoción desde diversos lugares de Rusia, singularmente por la comunidad de la Parroquia de San Miguel Arcángel de Murmansk, la familia de Denis y los claretianos que sirven al Evangelio en aquellas tierras. El P. Juan E. Sarmiento, párroco que acompañó los primeros pasos vocacionales de Denis, pudo unirse al evento desde Chile, donde está ahora destinado. Los jóvenes que responden habitualmente a las convocatorias de Hakuna que tienen lugar en la Misión Española de la capital francesa compartieron con la comunidad claretiana un momento especial de oración y conocieron de primera mano el testimonio vocacional del nuevo profeso perpetuo.

En este octubre de tanto gozo, ciento cincuenta años después de la muerte de San Antonio María Claret, la provincia de Santiago, llena de alegría, celebrará la profesión perpetua de tres jóvenes misioneros.



 

Categoría: